Lo peor del ganso
• Nada nuevo dice Acosta Naranjo, la perversidad del profeta es patológica
Miguel A. Rocha Valencia
Algunos dicen que la maldad del caudillo de la 4T es demencial, tan profunda que no conoce límites tanto, que es progresiva y como bien dice Guadalupe Acosta Naranjo, falta que le salga lo peor, lo cual no quiere decir que sea un retrasado mental, por el contrario, como buen sicópata, es muy inteligente y no se detendrá, eso dicen quienes lo conocen de cerca.
La persecución contra el poder Judicial y concretamente la Suprema Corte de Justicia de la Nación no es casual, necesitaba un detonador, buscó someterlo por “las buenas” a través de unas reformas que instrumentaría desde y hacia adentro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea quien fue sometido desde el principio por sus propios pecados, ya que cuenta con amplio expediente de trapacerías ya difundidas y que vienen desde Ernesto Zedillo y el Fobaproa.
Llegó Norma Piña y la aplicación de la Ley, la guerra estaba desatada, pero por el sometimiento de la SCJN que a pesar de tener alfiles presidenciales no cedió y fue el valladar donde el Ejecutivo topó en su intención de mandar al diablo, destruir o someter al poder Judicial.
No obstante, logró colonizar al IFE con Guadalupe Taddei y el TEPJF con Mónica Soto Fregoso, quienes le pagaron desestimando las violaciones fragantes a la ley y otorgándole a Morena y rémoras la mayoría calificada en San Lázaro.
Pero la persecución continúa por todos los frentes y es que en el esquema de la 4T el mesías debe alzarse como el poder absoluto, sin instituciones democráticas que lo contengan o cuestionen y eso también va para los críticos incluyendo países extranjeros, de ahí su urgencia por fortalecer lazos con naciones cuyos gobiernos son afines a sus planes o al menos les conviene tenerlos como aliados.
Por eso lo mismo con cañonazos de dinero, promesas de redención, perdón de los pecados y carpetas de investigación, las presiones desde palacio Nacional van contra todos, incluyendo en la compra de aliados que, sometidos, dejen inoperable a la oposición.
Mayoría calificada que sin duda habrá de tener también en el Senado, no faltará uno de los 43 opositores que se rinda, algunos dicen que será el veracruzano de estirpe priista, otros que alguno de MC y yo digo que puede ser cualquiera luego de que lo citen a “negociar” que para eso se pinta Adán Augusto López como jefe de sicarios de la 4T en el Senado.
Pocas esperanzas hay de que los opositores resistan, es todo el poder del Estado, son las fiscalías estatales, la federal, la Unidad de Inteligencia de Hacienda, el SAT, el Ejército, la delincuencia organizada, los pecados propios de antaño; por cualquiera de esos sitios puede llegar el flechazo al talón de Aquiles.
Y si no, buenos serán los cañonazos, la promesa de un futuro promisorio a corto plazo para uno de ellos y su familia, así como ocurrió con casi todos los perredistas que alcanzaron curul o escaño en esta elección, desde Nora Arias en CDMX, Víctor Hugo Lobo en San Lázaro o Araceli Saucedo Reyes y José Sabino Herrera en el Senado.
Y va a pasar, la persecución es encarnizada, en este espacio lo dijimos y reiteramos que falta lo peor y eso es lo que nos dice Guadalupe Acosta Naranjo pues en realidad pocos saben hacia dónde nos lleva el tlatoani tabasqueño a quien el país y los pobres le valen madre.
Tiene un objetivo fijo, se siente predestinado y eso lo tiene más envenenado pues sabe que el poder absoluto no le va a durar todos los años que desea.
Par él, desde 2006 debía detentar el poder, a estas alturas ya hubiese dado dos vueltas a la presidencia, sería un émulo de lo que se ve en otros países latinoamericanos, en China o Rusia.
Si aún falta lo peor del ganso quien no dejará de ejercer el poder, no lo va a compartir por eso su corcholata quien está dispuesta a ser la pelele, la tapadera y cargar con la ignominia histórica de las locuras de su patrón, ya lo dijo en su gobierno no desaparecerá la chachalaca macuspanense.
No se trata de una promesa sino de una declaración abierta donde nos dice quién va a gobernar realmente, pero sin la responsabilidad institucional de las consecuencias negativas. Será la próxima presidenta una encargada del despacho, no me cabe duda.
Y será la científica quien concluya o avance en la obra de su amo, insistimos, sin importar consecuencias dentro o fuera del país. México es otro desde que el caudillo de Tepetitán asumió el poder y no hay duda personifica la perversidad llevada al extremo; compró lealtades con dinero presupuestal y sometió a muchos de sus rivales con extorsiones y amenazas; el método no falla, él lo conoce bien pues de ello vivió toda su trayectoria política.
Veremos…