Orlando Daniel Hernández
El rostro de la imagen de la Virgen de Guadalupe que llora desde un domicilio particular en la colonia Obrera, ha llenado de fieles católicos la morada de los residentes de la casa marcada con el número 47 de la calle Joaquín Amaro.
En efecto, el milagro que se reportó el pasado domingo 2 de junio está cobrando relieve por lo que centenares de hombres y mujeres de todas las edades, abarrotan el lugar desde que se conoció la noticia.
Y es que para muchos, la virgen derrama lágrimas que se confunden en su rostro de yeso.
En la vivienda se ha montado un altar especial donde se han depositado flores y veladoras, además que hay rosarios en varias ocasiones del día ante el milagro.
El ir y venir de los visitantes se ha acrecentado durante la semana y según se ha señalado han llevado devotos de varias partes de Michoacán.