La violencia contra las mujeres está azotando a México en el todo el territorio, son más de mil 900 mil feminicidios que se han registrado y se suman a las 138 mil que han perdido la vida por violencia a lo largo y ancho del país.
El gobierno federal ha preferido ignorar esta realidad, suprimiendo programas importantes de apoyo a las mujeres e ignorando las voces que exigen justicia. La impunidad no debe ser la que reine en el país, como hoy ocurre.
Es urgente establecer presupuestos específicos y dirigidos, que su objetivo sea dar acompañamiento a las víctimas de delito, y poner alto a la revictimización que es ejercida por el propio Estado Mexicano.