Orlando Daniel Hernández
En su mayoría forman parte de una flotilla en mal estado.
Llantas con cuarteaduras, sillones en mal estado, carencia de luces y falta de placas, son sólo parte de evidencias en las que transita el transporte público.
Lo anterior se hace evidente ante los ojos de los usuarios, sobre todo en las rutas Panteón, Alberca y Leandro Valle.
Los vehículos deben estar aptos para trasladar a los usuarios de manera segura, señala Mercedes “N”, una señora de la tercera edad y quien por décadas ha utilizado el servicio.
Es barato pero ya los camiones están en muy mal estado, aunque hay sus excepciones,señaló.
Además, hay ventanas rotas, pero eso sí nunca falta el sonido de los estéreos y mucho menos, la plática vía celular de los conductores.