En Michoacán avanza con éxito el programa de trasplantes renales para las personas sin seguridad social y en lo que va del año se han realizado 15 injertos de riñón de manera gratuita, lo que ha permitido que los pacientes logren mejorar su calidad de vida, ya que, además, el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla los dota de inmunosupresores, medicamentos que se deben tomar de por vida para que el cuerpo no rechace el órgano trasplantado.
A través de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM) es que se realizan los trasplantes, así como los estudios de compatibilidad, beneficios con los que no se contaba en 2021 en que se recibió la administración, pues el programa de trasplantes se encontraba suspendido por falta de licencias sanitarias de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Gracias a que el gobierno de Ramírez Bedolla reactivó este programa, también se han reforzado las campañas de sensibilización por personal del Consejo Estatal de Trasplantes (Coetra) y son cada vez son más las familias que acceden a donar los órganos de sus seres queridos, lo que ha permitido regalar esperanza de vida a otras personas.
Del total de trasplantes realizados, 14 se han llevado a cabo en el Hospital General Dr. Miguel Silva, y uno más el Regional de Uruapan Dr. Pedro Daniel Martínez.
Cada paciente trasplantado incrementa su sobrevida hasta 20 años, siempre y cuando no abandonen el consumo de los inmunosupresores, los cuales son gratuitos en el primer año posterior al trasplante.
Es así que en el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla se garantiza la atención a pacientes con enfermedad Renal Crónica (ERC), por ello, se han incrementado en solo dos años el servicio de hemodiálisis para pacientes sin seguridad social, pues de las 16 máquinas que se tenían, hoy son 36 las que están en operación los 365 días del año, las 24 horas del día.
Desde 2003 que se puso en marcha la donación y procuración de órganos en Michoacán, se han logrado trasplantar 783 riñones, y en esta administración se han brindado de manera gratuita el primer año, los inmunosupresores a los beneficiarios.