En marcha estrategia mediática de López Obrador para cantar victoria electoral desde ahora
Jorge Hidalgo Lugo
En la euforia de sentir que su estrategia mediática va en caballo de hacienda, el dueño de Morena y sus floreros olvidan que nadie se muere en la víspera y aun cuando manejen diferencias inalcanzables, este juego todavía no comienza formalmente para pregonar que no hay obstáculo enfrente y que esta vez no habrá espacio para el regreso de los gobiernos “corruptos” como pregona la corcholata preferida de su profesor.
Esto tiene aún mucha cuerda por delante, pero sí es notorio el cambio de ruta que desde Palacio Nacional se orquesta a fin de allanar el camino de quien hasta el momento es una simple marioneta dedicada a repetir lo que le instruyen en el cuarto de guerra y ponderar que sólo Andrés Manuel López Obrador debe ser venerado, al grado de ofrecer la continuidad por él dictada a cabalidad.
Sin propuestas, ni ideas. Menos algo que pueda considerarse como oferta surgida de su propio peculio, Claudia Sheinbaum cumple hasta el momento con el guion y fiel observante de las indicaciones, no sólo pontifica la figura del mesías tabasqueño, sino que hace sentir que no hay nada mejor que seguir el esquema trazado, aunque en este momento México luzca destrozado y rumbo al estado de coma.
En esa dinámica, también es necesario señalar, mucho contribuye hasta el momento el equipo opositor que pareciera sigue atolondrado y sin vida propia, pese al esfuerzo particular que realiza Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz quien sin perder la frescura y animosidad, mantiene un contacto personal con la sociedad civil, los potenciales votantes que desde ese sector se muestran resueltos a dar la pelea comicial, pese a la elección de Estado que se cocina en las catacumbas de Palacio Nacional.
A contra pelo de la candidata de la mafia en el poder la Señora X no sólo carece de recursos económicos, sino además ahora tiene que encarar el giro radical que comienzan a mostrar una inmensa cantidad de medios informativos, que ven llegado el momento de alinearse con la ex jefa de gobierno capitalino, para no seguir marginados de los convenios publicitarios que en este sexenio les fueron gravemente recortados o que sufren el veto presidencial.
De la mano a este “reencuentro” de la oficialidad con la prensa chayotera como la estigmatizó siempre el payasito de las mañaneras, podemos apreciar el giro radical que al respecto también asume ahora, el belicoso atacante quien ya no distrae su tiempo ni esfuerzo alguno, para satanizar a los medios o informadores como fue cotidiano en el circo de tres pistas montado frente al zócalo capitalino.
Así un mesurado López Obrador deja de agredir a la prensa al servicio de los neoliberales y da paso a su mascota para que haga labor de reconciliación al extremo que hoy no debe sorprender que haya sendos encabezados donde se afirma en rotativos de prestigio, existen ventajas de hasta 30 y 40 puntos porcentuales a favor de la mascota morenista.
Desde su parcela, la senadora parece no mostrar apremio mayor y eso hace presumir a sus seguidores que debe estar fundado en algo sólido y no sea sólo alarde, aunque esos mismos medios y actores informativos antes señalados, insistan ya en difundir que Xóchitl ya se “desinfló” y en consecuencia, la destrucción del país continuará aunque ya no sería por muchos años el desenlace fatal.
Y aunque otro de los efectos que resiente esta estrategia mediática que despliega la morenista, se evidencia con los tránsfugas del PRI, PAN y lo que queda del PRD, que saltan en busca de sobrevivir como las ratas cuando se hunde la embarcación, con tal de seguir pegados a la ubre presupuestal, así suene a contradicción patológica que sigan con la discursiva de acabar con los vestigios del prianperredismo desde Morena y sus promiscuos aliados del PT y Verde Ecologista, cosechando desechos tóxicos precisamente del prianperredismo.
Con las reservas del caso, en el cuarto de guerra de la hidalguense deben mantener viva la rebeldía mostrada por millones de mexicanos que viven agraviados por el abuso de poder obradorista e ir por más, en una campaña de tierra como ya lo intenta la propia senadora, pero cada vez más firme y decidida.
Es momento de romper atavismos y dejar de lado el sitio de confort para ensuciarse los zapatos, hacer girones la vestimenta si es preciso e ir al encuentro de quienes esperan un mejor futuro para sus hijos, para sus familias, sus seres queridos.
Pero sobre todo, ir en pos de quienes no están en la actitud de sentarse en la vereda y esperar un milagro que rescate a México y detenga su inminente destrucción.
Para ello será fundamental por igual que se revisen a conciencia y con mucha responsabilidad, los perfiles de quienes vayan a postular para las diferentes posiciones que estarán en juego, porque de ello dependerá en mucho dar el golpe certero a las trapacerías que se orquestan en el desesperado intento que harán por salvar del juicio político a López Obrador.
Sobre todo, cuadros o propuestas de hombres y mujeres que no traigan cadáveres en el clóset, con cuentas pendientes que propicien la impugnación de sus respectivas candidaturas, que será otra faceta del plan que tienen para llevar a cabo su elección de Estado.
Porque aun con la rebatinga que ya traen en Morena y sus impúdicos consortes, obliga a aminorar al máximo cualquier judicialización que se quiera hacer en contra del bloque opositor y sus aspirantes.
Por lo pronto, se equivocan quienes auguran que López Obrador ya arrasó en el 2024 y podrá irse muy campante a La Chingada, lugar de descanso por él elegido.
Vale…
