Luis Repper Jaramillo*
Lo sucedido el 4 de junio en el Estado de México, no fue casual, trabajo pulcro de Morena y larvas; tampoco llama a sorpresa, pues el “triunfo” de Delfina Gómez (fina para la transa) sobre la priista Alejandra Del Moral, fue causal, una trama perversa entre Andrés Manuel Lòpez Obrador, Grupo Atlacomulco, Alfredo del Mazo Maza, PRI Nacional, Alejandro Moreno Cárdenas (Alito). Un acuerdo, cambalache, corrupción, negociación mala leche (en contra de los electores mexiquenses, pues su voto no importò, ya habìan pactado ceder Estado de México a Morena y Coahuila, al PRI, un año antes de la elección).
Los sucios comicios fueron una Elección de Estado, en donde la Transformación de 4ª (léase Lòpez Obrador) echó todo el poder de Palacio Nacional para quedarse con la Joya de la Corona Electoral (el mayor número de electores del padrón nacional -12 millones 693 mil 34 ciudadanos-
Dispuso para “apoyar” a la Fina para la Transa, recursos económicos, humanos, redes sociales, canales, radios y espacios publicitarios oficiales, infraestructura gubernamental y desde luego las larvas inmundas del gabinete, de las gubernaturas morenistas, alcaldías, presidencias municipales, chairos, amlovers, pejezombies, botts (que jugaron un papel fundamental) para “hacer ganar” a la Reyna de la Transa. Hicieron acto de presencia con recursos públicos y humanos Claudia Sheinbaum (CDMX), Cuitláhuac García (Veracruz), Alfredo Ramírez Bedolla (Michoacán), Evelyn Salgado (Guerrero), Andrés Manuel Lòpez Obrador (Palacio Nacional), Julio Menchaca (Hidalgo), Alfredo del Mazo Maza (Estado de México PRI), Lorena Cuéllar (Tlaxcala), Mara Lezama (Quinta Roo), Adán Augusto Lòpez Hernández (Gobernación), Sandra Falcón Venegas (Alcaldesa de Texcoco), etc.
El propio presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno “Alito”, pese a encabezar, junto con Marko Cortés (PAN), Jesús Zambrano (PRD), la Alianza Va X México, que se suponía apoyarían a su candidata Alejandra Del Moral, finalmente la dejaron sola, abandonada, inerte ante la aplanadora oficial y sus “marranadas”. Insisto. “Alito” en la intimidad jugó las contras a su partido y transó con Lòpez Obrador, Mario Delgado, Alfredo del Mazo, ceder la entidad mexiquense, a cambio de quedarse con Coahuila.
Del Mazo Maza, por su lado, tal cual, en 2018, lo hiciera Peña Nieto a punto de dejar la presidencia de México, con Andrés Manuel, en Palacio Nacional, en lo oscurito, bajo la mesa, con perversidad, “acordaron” impunidad entre ambos: ni el Peje perseguiría al mexiquense, y èste no revelaría, exhibiría, haría público secretos personales de Andrés Manuel, corruptelas en su paso por el PRI, la Jefatura de Gobierno del DF, cuitas del macuspano en sus andares de eterno candidato presidencial. Affaires aprovechando simpatías y éxitos en tantos años de vagabundear en la política. Peña callaría en tanto mantuviera su riqueza malhabida, su libertad e impunidad. Así quedaron. A punto de concluir el fallido sexenio morenista, el expresidente priista goza de vergonzantes inmunidad. El otro empoderado.
Decía que, Del Mazo, en las mismas circunstancia que su paisano, traficó sus impurezas a cambio de no ser perseguido por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), del infumable Pablo Gómez, por tantas transas que hizo a lo largo de 6 años con los presupuestos estatales y federal, de sus programas “sociales” Salario Rosa, Despensas Alimentarias para Familias Fuertes, Adultos Mayores, Comunidad Fuerte, Fondo ($) de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), que nunca han sido auditados por la Auditoria Superior de la Federación (ASF), La Secretaría de la Función Pública, la Cámara de Diputados mexiquense, la SHCP, el SAT, etc.
Millones de pesos depredados a lo largo de 2190 días (sexenio), miles de ellos no justificados o reportados a la autoridad fiscal, ni estatal, ni federal.
Al junior de la Dinastía Del Mazo, no le incomodó ni preocupó si el Peje le da una embajada, un consulado, una representación de México en el mundo; un destierro temporal mientras pasa la fiebre del mal gobernador transa, corrupto, impune. Lo que no quiere Alfredo es que le incauten, decomisen, confisquen su fortuna “atesorada” (robada, defraudada, como Delfina Gómez -fina para la transa-) desde Palacio de Gobierno, en Toluca.
Si el Peje le regala una misión diplomática, sin perder su “dinerito malhabido” se dará por bien servido el neo morenista. Traidor, vende elección, el insignificante aún gobernador (hasta la noche del 15 de septiembre de 2023) una vez cumplida la misión de sepultar al Grupo Atlacomulco, y entregar en bandeja de plata la plaza política, económica, electoral: el Estado de México (la joya de la corona electoral) a Andrés Manuel Lòpez Obrador, propietario, gerente, director general, capataz, de la empresa Morena, propiedad de la familia López Obrado/Lòpez Beltrán.
Insignificante “gobernadora”
La realidad, Delfina (fina para la transa) no ganó la elección, la puso ahí Andrés (candidata) para justificar “el pacto” Lòpez/PRI/Del Mazo, pues su negro, nefasto, vergonzante pasado, en la presidencia municipal de Texcoco, la condena. Ahí aplicò el “diezmo” (a fuerza, vía nómina) a 472 empleados durante los 3 años de su gestión, con valor agregado de otra “contribución” de trabajadores del DIF Texcoco, a cargo de su hermano Alejandro, quien le entregaba las “aportaciones” para la causa de Andrés Manuel, Morena y su propia tajada para futuras aspiraciones electoreras.
Tan sòlo en ese trienio, la morenista defraudò a sus empleados por 13 millones 800 mil pesos. Lejos que la autoridad estatal (qué raro, Alfredo del Mazo Maza) le hubiese fincado responsabilidad penal, por delitos de fraude, robo, desfalco, etc. la dejó hacer, la dejó pasar.
Para “sacarla del problema”, Andrés Manuel, la rescató dándole una diputación federal, por el Estado de México, tenía que hacer curricola. La quitó de San Lázaro, para habilitarla como Delegada Federal de los Programas de Bienestar, en el Estado (en donde había dinero público fácil de transar, coludida con Lòpez Obrador).
Ya con alforjas a ¾ llenas de corrupción, vuelve a la carga la inmunda pareja. De simple burócrata mediana, Lòpez la impulsa (a donde había más presupuesto federal) como Secretaria de Educación Pública (2021 a 2022) dependencia que hasta entonces ejercía el presupuestos más elevados del gobierno.
Como la transa fluye por las venas de Delfina (fina para la transa) aplica en la SEP la máxima “en arca abierta hasta el mas justo peca”. La señora no iba a dejar pasar la oportunidad… ¡lo hizo!!
En enero de 2022 la Auditoría Superior de la Federación (ASF) que depende de la Cámara de Diputados, informó que, tras la salida de la Secretaría, y posicionada como Senadora de Morena por el Estado de México, se detectaron irregularidades en el manejo de dinero en la SEP por más de 830 millones 700 mil pesos en pago de sueldos elevados, prestaciones, categorías no consideradas; trabajadores designados con deceso en nómina, bienes adquiridos no localizados o que no operan, entre otros. Las transas de la “insignificante gobernadora” las hizo en Centros de Estudios, Bachilleratos, Institutos, Universidades Tecnológicas y Politécnicas.
Y… como nada le sucedió (penalmente) por los fraudes en Texcoco, nos repitió la dosis. Esta vez fue Andrés Manuel López Obrador, quien desestimó, ignorò, ocultó la verdad a los mexicanos. Motu propio exoneró a la fina para la transa, quien lejos de purgar cárcel por delitos de fraude, robo, estafa, dolo, con recursos públicos federales (SEP), es premiada por Morena, T4a, el Peje, Alfredo del Mazo, PRI, Alito Moreno, como candidata a la gubernatura del Estado de México -historia conocida- quien será una insignificante “gobernadora”
Delfina (fina para la transa) no ganó los comicios, fue Andrés, con todo el peso del Estado, y digo peso, porque se depredaron millones de èstos, en una causa ya “negociada” por los actores citados.
Es un hecho, la fina para la transa, sòlo calentará el sillón de Palacio de Gobierno, en Toluca, pues los hilos y decisiones se manipularàn y tomaràn desde Palacio Nacional, pues López Obrador será quien gobierne a los mexiquenses, ante la incapacidad, impreparación, nulidad, sin perfil profesional para el cargo, incultura, enanez, de la mujer utilizada por la cúpula de Morena, con fines económicos, políticos y electoreros para 2024.
Delfina (fina para la transa) Gómez Álvarez, es sòlo un instrumento manejable para los intereses personales, económicos, parentales, de grupo, del Peje rumbo a la madre de todas las elecciones: la presidencial y legislativa 2024 (cambio total de senadores y diputados).
La Gómez Álvarez no tiene personalidad, imagen, inteligencia (sòlo obedece, acata, reacciona, se empina ante las órdenes del mesìas tropical) Carece de autonomía, independencia; no sabe hablar ni convencer en público, es pelele (débil, de poco carácter, manipulable, sin voluntad propia). Un desastre como fue en Texcoco, la SEP, el Senado.
Experta sí, en la transa, hurtar dinero público. Si en Texcoco robó a 472 empleados del municipio, casi 14 millones de pesos; en la SEP más de 830 millones 700 mil ¿qué no hará en el Edomex, con 125 municipios y presupuesto anual de 356 mil 817 millones de pesos, en 2023? Para el 24, ese dinero será superior. ¡Ya se frota las manos!
¡¡Pobre Estado de México, en manos de una rata (de 2 patas) inmunda!!
*Colaborador de los Grupos Editoriales Digitales pasaporteinformativo.mx, gustavorenteria.com, latitudmegalopolis.com, portalhidalgo.com, grupometropoli.net