“Muchos dicen que han cumplido con su deber,
y a mí, me da mucho gusto no haber cumplido ni
con la mínima parte de él, para desgracia o fortuna de esta patria…”
Carlos Monsiváis
Arturo Suárez Ramírez/@arturosuarez
Cuando los políticos son candidatos hacen de todo para posicionarse y luego pedir el voto, después la queja de quienes los eligieron porque no regresan o cumplen sus promesas de campaña.
Ahora nos encontramos inmersos en un proceso electoral inédito para elegir jueces, magistrados y ministros. Se trata de un ejercicio enredado, engorroso que, incluso, los participantes no entienden al cien, por lo menos eso me dijo uno de los partícipes a juez, incluso no hay lógica de por qué los mandan al territorio cuando viven en otras alcaldías. Pero ahí vamos, tendremos que aprender y seguramente será perfectible.
El arranque de las campañas ya sido complicado porque la mayoría de los participantes no son políticos y no deberían serlo, sino estudiosos del derecho, de las normas con ética y formación constante, no políticos que bailan en el tianguis o para redes sociales, sus campañas deberían ser de más nivel como el Poder Judicial que queremos construir, aunque para los Morenos si se trata de política y de repartirse el botín.
Así ya vimos a unos de estos darse baños de pueblo y la justicia debe ser para todos, no por nada la representación es de una mujer con una venda en los ojos. Otros hacen su circo a las afueras de la facultad de derecho con un chicharrón en la mano porque es el más preparado.
Vaya circo que están montando y los otros que se dejan arrastrar… pero mejor ahí la dejamos.
¿Antisistema, de dónde?
El que no ve la suya es el senador Fernández Noroña, pero nadie le hace campaña negra como dice y lloriquea, simplemente es lo sembrado y abonado con odio, con su rencor y actitud perdonavidas que adopta al ser cuestionado.
Ahora suspendió una presentación que sostenía con estudiantes del CIDE. Se puso furioso porque le colocaron zapatos como los encontrados el rancho de Teuchitlán en Jalisco, no le pareció, se puso furioso y luego de aventar un discurso venenoso salió del lugar. Les guste o no, hoy Noroña pertenece al sistema que tanto criticaba, desde su posición no se puede ser antisistema y viajar como lo hace, representar al Senado y ser parte de la clase política donde se le remunera y muy bien.
Entre Palabras
¿Qué lo de los Yunes no era amor sino conveniencia? Era más que claro, como dice en su carta dirigida a Luisa María Alcalde, solo fue por la votación de la Reforma al Poder Judicial y seguramente algunos otros favores…
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