¿Los dejará operar?
Al cabo de los años he observado que la belleza,
como la felicidad, es frecuente.
No pasa un día en que no estemos,
un instante, en el paraíso.
Jorge Luis Borges
Arturo Suárez Ramírez/@arturosuarez
El Pejelagarto es un personaje que resultó muy bueno para la calle, para los discursos en la plaza, para los plantones como el de Paseo de la Reforma, pero nos salió muy malo para la administración pública y al que no crea ahí están los resultados de más de cinco años de yerros que se han pagado con recursos y vidas.
Su gran pecado ha sido creerse todopoderoso, un sabiondo diría el tabasqueño, aunque destile ignorancia como cuando dice que no tiene ciencia gobernar y menos sacar petróleo “solo había que hacer un agujero en la tierra, era como extraer agua”. Así es el presidente saliente, el que pidió obediencia ciega a su equipo de trabajo y relegó los perfiles qué debían cumplir para después, total, sabía que él era el jefe del Ejecutivo y también del gabinete. Lo dijo en su mañanera, nada se mueve sin que lo sepa el presidente.
Varios pagaron su osadía por señalar errores o simplemente sugerir como Irma Eréndira Sandoval, Carlos Urzúa o hasta Arturo Herrera. A otras ni el beso ni el abrazo les regresó. Otros salieron por piernas porque no aguantaron el trato indigno y se volvieron sus más acérrimos críticos.
Hoy en el balance cada uno tiene su lugar y los que se portaron bien ya reciben sus premios, algunos hasta con embajadas como los ex gobernadores que fueron dóciles y entregaron sus estados a Morena como Quirino Ordaz, Omar Fayad, Claudia Pavlovich y algunos más, otros sobrevivirán al sexenio y ya tienen acomodo en el de Claudia Sheinbaum.
Luego del anuncio de seis nombres que acompañarán en la primera parte de su gobierno a Sheinbaum Pardo, entendemos que ya está pagando los acuerdos como el de Marcelo Ebrard que va a la Secretaría de Economía y al que tuvieron que apaciguar, el mismo que denunció como Sheinbaum y Adán Augusto habían excedido los topes de la campaña interna, aquí se lo dije, Ebrard guardó en el cajón de su escritorio la dignidad.
Ahí va Ernestina Godoy a la Consejería Jurídica, bien pagada porque fue ella la persecutora en la Ciudad de México, así lo hizo con opositores y periodistas, por eso no fue ratificada como fiscal en la CDMX por parte del Congreso de la Ciudad de México.
Las cartas fuertes y con credenciales interesantes son Juan Ramón de la Fuente a Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y Rosaura Ruiz que operará la primera Secretaría de Ciencia y Tecnología, por último, Julio Berdegué a la Secretaría de Agricultura que resulta una incógnita.
Veremos si Claudia Sheinbaum los deja operar y les da los recursos suficientes para entregar buenos resultados o se convierte en una tirana como el tabasqueño. Por cierto, la mayoría es incondicional de López, aunque como se dice no se puede servir a dos amos… pero mejor ahí la dejamos.
Entre Palabras
La “ministra del pueblo” se ha dedicado a hacer campaña política a favor del plan C y fue increpada en Iztacalco por personas identificadas como trabajadores del Poder Judicial de la Federación. La misma ministra que es corregida por sus pares un día sí y otro también, ella es muestra del camino que no se debe seguir. Gana la ignorancia y pierde la justicia con la politización.
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Hasta la próxima.
