PODER PÚBLICO
José Cruz Delgado
En mis andanzas por la región de tierra caliente, en Michoacán, concretamente en Apatzingán, conocí a mucha gente, pero en ese tiempo no existía la violencia como en la actualidad.
Pero acabo de estar por esas tierras y me comentaron que Francisco Huacuz, mejor conocido como “Paco Huacuz” quien busca la reelección como diputado federal por la coalición Fuerza y Corazón por México, es un hombre valiente y hasta temerario, que está arriesgando el pellejo o “rifándosela” como dice la rasa allá, porque ha tenido los pantalones para denunciar, tanto en la tribuna de la Cámara Baja como el estado de Michoacán la inseguridad y la presencia de grupos criminales, pero sobre todo porque defiende a su terruño, a su gente con el corazón en la mano pues.
Como se ha escrito en este espacio, hay buenos y malos políticos en todos los partidos, pero más malos que buenos que solo ven por sus intereses personales y no de la comunidad.
Reitero, Paco Huacuz ha tenido los tamaños, la valentía de denunciar públicamente el grave problema de la inseguridad que priva en el estado de Michoacán, sobre todo de las amenazas de que son objeto algunos presidentes municipales por parte de la delincuencia.
Bueno, pues la gente me comentó que está decidida a llevar a la victoria a Paco, porque el de enfrente, o sea el morenista Antonio Cruz Lucatero es un tipo que como presidente municipal le dio en la madre a los apatzinguenses y al municipio convirtiéndose en un personaje destestable.
Mire usted En muchas ocasiones, el legislador ha dicho que tiene pruebas de sus dichos y que se las enseña al “cuatroterito” gobernador Alfredo Ramírez Bedolla cuando guste, pero todo ha sido en vano, se ha negado a escucharlo.
El apatzinguense es valiente y hasta temerario, sabe a lo que se expone con sus denuncias y aún así sigue insistiendo en el tema de la inseguridad, sobre todo en esa región por eso es una persona muy estimada.
Paco Huacuz, el de “con huevos por Michoacá” como se le conoce también, ha ganado mucha popularidad por sus constantes denuncias sobre la inseguridad que prevalece en el país, no solo en su estado natal, Michoacán.
Reitero, es Sñun hombre valiente y hasta temerario que ha hecho valer su voz en la Cámara de Diputados. Cada vez suma más adeptos en el estado por esa valentía que lo caracteriza al denunciar la ola de violencia que azota al estado y ha tenido la hombría de señalar con índice de fuego a las autoridades estatales y federales de ser omisas en el tema, por lo que cada día crece su popularidad.
Paco Huacuz tiene muchas simpatías porque es aguerrido y le ha reclamado al gobernador morenista Alfredo Ramírez Bedolla que no hace nada para detenerlos ni para frenar la inseguridad, y eso le ha generado puntos a su favor.
Por cierto, es el único que ha tenido las agallas de cuestionar a funcionarios federales por sus fallidas estrategias de seguridad, se les ha puesto al tú por tú y les ha dicho en su jeta que sus estrategias valen una chingada. Por lo pronto sus bonos siguen creciendo.
Francisco Huacus se ha pronunciado por cambiar la realidad de México donde permea la inseguridad, violencia y carente de justicia, y dice que está en manos de las y los ciudadanos, que tengamos la oportunidad de decidir a través de las urnas, lo que queremos como país.
Expresó su desaliento por la ola de inseguridad que se tiende en nuestro país, por regiones y en las entidades, como el caso de Michoacán, donde afirmó, que la situación en “tierra caliente” no ha cambiado, a pesar de que el gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, asegure lo contrario.
Rechazó que los mexicanos “bajemos los brazos”, ante la creciente presencia de grupos delictivos por todo el país, y precisó que los mexicanos podemos cambiar el rumbo que dirige actualmente el gobierno de Morena a través de sus gobiernos estatales y federal con Andrés Manuel López Obrador.
Advirtió qué será un proceso difícil, violentado por los intereses de la delincuencia organizada, por lo que exhortó al gobierno federal a establecer las garantías requeridas para unas elecciones libres.
