Palabras Más
Contra el prepotente
Noam Chomsky
Arturo Suárez Ramírez/@arturosuarez
La presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, que comenzó en 2016, fue una montaña rusa política caracterizada por una constante confrontación y controversias diarias con líderes de todo el mundo. Trump, conocido por su estilo sin filtros y su inclinación a “ir de frente” sin usar máscaras, se destacó por su disposición a enfrentar a cualquier adversario, ya fuera en el ámbito nacional o internacional. Esta actitud, aunque aplaudida por algunos, resultó ser una espada de doble filo.
Como suele suceder en democracias robustas, el electorado eventualmente buscó un cambio. En 2020, los votantes eligieron a Joseph Biden como el 46º presidente de Estados Unidos, en gran parte debido al cansancio con las constantes controversias y la necesidad de estabilidad y experiencia en la Casa Blanca.
A Biden la presidencia le llegó tarde porque sus mejores tiempos como político habían pasado y el tiempo no perdona, con 77 años juró el cargo quien también fuera el vicepresidente con Barak Obama, los tropiezos, las desconexiones, las caídas, lo gris del mandatario lo hicieron perder fuerza para buscar un segundo periodo.
Aunque Biden intentó ganar la carrera y llegar al primer martes de noviembre para la elección, ha habido factores que terminaron por echar abajo sus planes. Primero, la debilidad del personaje y claro que eso fue utilizado por el equipo de su contrincante para exaltar los traspiés que ha tenido, su edad y hasta los padecimientos, por si fuera poco, hace unos días se dio a conocer que se contagió de Covid-19, de nuevo material para presentar a un presidente disminuido ante el mundo.
El segundo punto quedó de manifiesto en el debate del jueves 27 de junio, ahí se vio a un Trump mucho más combativo que Biden y la encuesta de CNN sobre ¿quién ganó el debate? Arrojó que la audiencia percibía que el republicano tuvo un mejor desempeño, en proporción del 67% frente al 33% del demócrata. Aun con todo y los problemas legales de Trump, los mismos votantes decían que esperaban que tuviera una mejor actuación que Biden, les daban 55% contra 45% respectivamente. Eso sin duda fue el foco rojo que aumentó las voces que pedían a Joseph Biden se bajara de la contienda porque repercutió en la recaudación de dólares para la campaña.
El tercer punto. Sí algo sabe hacer Donal Trump es comportarse como un prepotente y así ha sido, aumentó el ataque contra los migrantes y la política implementada por el actual gobierno, así como la crisis que se vive por consumo de fentanilo, pero sin duda, el mayor empujón, uno para bajarse y el otro para subir, fue el atentado en contra del magnate que lo convirtió en una especie de mártir para los estadounidenses que compran el discurso supremacista. Las primeras palabras en mitin luego del hecho Pensilvania fueron “Me llevé un balazo en nombre de la democracia”.
Pese a esto el voto antiTrump es amplio, además hay que agregar las sentencias de los jueces en contra del republicano, por eso un nuevo candidato o candidata les dará impulso a los demócratas.
Todo parece que está cantado para un segundo mandato de Donald Trump, pero afortunadamente la política es dinámica, con la renuncia de Joe Biden a la carrera por la Casa Blanca se abre una nueva oportunidad de renovar al candidato, o mejor dicho la gran posibilidad para que sea candidata. Ahí están las voces que impulsan a la vicepresidenta Kamala Harris quien cuenta con todas las credenciales, pero también como alternativa aparece Gretchen Whitmer gobernadora de Michigan y hasta la ex primera dama Michelle Obama. Otros en la lista son los gobernadores de California Gavin Newsom, el de Illinois Jay Robert Pritzke y Josh Shapiro gobernador de Pensilvania.
Donald Trump y los republicanos le llevan ventaja a los demócratas en la carrera por la presidencia, pero todavía tienen tiempo para cerrar filas y recuperarse, rescatar a los indecisos y sobreponerse al “héroe” que sobrevivió a un atentado orquestado desde las sombras internacionales. Sí la lógica se impone, los demócratas tendrán candidata que aglutine el voto femenino, según una encuesta de CNN la aún vicepresidenta estadounidense estaría a dos puntos del republicano, veremos si Kamala Harris entusiasma…
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Hasta la próxima.