Morelia, ciudad de la cantera rosa guarda entre sus atractivos cultura y tradición, entre ellos se encuentra la tenencia de San Nicolás de Obispo, la cual tiene una antigüedad de 450 años y se localiza al Suroeste del municipio, es reconocida por su arte lapidario.
Entre sus atractivos se encuentra la Iglesia de San Nicolás de Obispo, reconocida por su técnica artesanal llamada “lapidaria”, es cuna del molcajete en Michoacán y tiene una pieza monumental de alrededor de 2 metros de diámetro; su población tiene una herencia ancestral en la creación de molcajetes y metates que dan sabor a la gastronomía en la preparación de alimentos en estos enseres, y es una de las principales actividades económicas de la comunidad, la cual comienza con la recolección de piedra volcánica proveniente del Cerro del Águila.
Los artesanos seleccionan las piedras y las llevan a sus talleres para tallar con extremo cuidado, al tratarse de piezas únicas que pueden ser molcajetes, metates, platos, comales, heladeras, lavamanos o cualquier artículo que pueda solicitar la o el cliente, aseguró el artesano de San Nicolás Obispo, Ramiro Sopeña Ángeles.
Este artesano con 25 años de profesión y que aprendió el oficio de manera generacional por su abuelo y su padre, refirió que la técnica se ha ido especializando en razón a la demanda comercial y lo que sus habilidades en este arte lapidario han podido desarrollar para realizar piezas decorativas o de uso en la gastronomía.
La tenencia de San Nicolás Obispo tiene su tradicional Feria del Molcajete que reúne arte lapidario, gastronomía y tradiciones, la cual se realiza del 17 al 19 de diciembre de manera anual, es promovida por el Ayuntamiento de Morelia que encabeza el alcalde, Alfonso Martínez Alcázar y la asociación civil de artesanos lapidarios, quienes pueden hacer una docena de molcajetes tradicionales por semana, aunque hay piezas especiales de una sola piedra que pueden durar semanas en su elaboración.
“Me han encargado piezas como una banca, en esas me he tardado casi un mes, en lo que traigo la piedra del cerro, se le da forma y se detalla al gusto de la gente”, resaltó Sopeña Ángeles.
A decir del jefe de tenencia de San Nicolás Obispo, Carlos Mora Martínez, los artesanos han diversificado las piezas que trabajan de piedra volcánica y no han perdido por la enseñanza de generación en generación del oficio, actualmente hay 50 artesanos dedicados al arte lapidario y en la comunidad se puede encontrar también muy rica gastronomía como el pan de rancho en horno de leña, salsas de molcajete, guacamole, así como mole, enchiladas, entre otras.
Este arte, tradición y gastronomía fue lo que pudieron conocer los estudiantes de la escuela primaria Wenceslao Victoria Soto de la zona urbana de Morelia, quienes fueron recibidos la institución educativa José María Morelos para recorrer, conocer y probar cada uno de estos atractivos de la tenencia de San Nicolás Obispo en una labor conjunta entre el Ayuntamiento de Morelia mediante la Secretaría de Agricultura, Desarrollo Rural y Medio Ambiente y la Secretaría de Educación del Estado.