Orlando Daniel Hernández
En Santa Ana Chapitiro, población ubicada en la ribera del Lago de Pátzcuaro y en donde se erige uno de los principales templos adoradores al culto de la Santa Muerte, sus fieles salieron a las calles por tres días para tomar parte de peregrinaciones para adorar a la llamada “Niña Blanca”.
En medio de oraciones, canticos, mandas, baile, tequila y banda, la fe que mueve los corazones de sus devotos, agradecieron los milagros y favores recibidos, en este santuario.
Con la pasión a flor de piel, los adoradores a este culto, cargaban figuras de la “Niña Blanca” de todos los tamaños, algunos hincados y otros bajo el éxtasis, no dejaron de agradecer el socorro a la imagen que veneran como poderosa y milagrosa.
Con más de mil imágenes bendecidas, incienso, copal y bebidas, además de los oradores al culto, llegaron al pueblo turistas de la región y del país, para tomar parte de esta deidad que se vivió durante los días 20, 21 y 22 de este mes de septiembre.
Aquí en Santa Ana Chapitiro se encuentra uno de los altares más grandes dedicados a la Santa Muerte en Michoacán, y con divinidad sus adoradores piden favores en medio de oraciones.
Si ojos tienen, que no me vean.
Si manos tienen, que no me toquen.
Si tienen pies, que no me alcancen.
Y no permitas que pase hambre o desgracias
