La salud es irrecuperable
Gregorio Ortega Molina
*Para realmente reconstruir el sector salud, se requiere de la voluntad de reorientar el gasto clientelar, reducirlo, y empezar a producir riqueza desde el minuto cero de la toma de posesión de Claudia Sheinbaum Pardo, porque de no hacerlo así, más pronto que tarde afianzaremos nuestros pasos y futuro crecimiento, en la misma ruta que siguen las repúblicas bolivarianas, notoriamente Venezuela y Bolivia, seguidas por Nicaragua y Cuba. El que no quiera verlo que se tape los ojos y extienda la mano para recibir su plástico del bienestar. Ahora nos salen conque resucitan el proyecto del médico en su casa, ¿con matasanos cubanos y venezolanos? A fin de cuentas, a caballo dado no se le ve colmillo
Con esa idea de construirle un segundo piso a la 4T, sobrecargado del humanismo mexicano, resultará imposible restablecer los niveles de eficiencia y calidad a los servicios que, por mandato constitucional, fueron perfeccionando los gobiernos de la República, hasta 2018.
Los niños que carecieron del plan completo de vacunación recomendado por la OMS, ya no lo tendrán, y a saber cómo es que pudiera afectarse su desarrollo, a lo peor nos resultan idénticos a Lenia Batres, a Marx Arriaga y al inefable doctor muerte, don Hugo López Gatell, quien de seguro no encontrará palabras para explicar la falta de medicamentos a los niños con cáncer y las quimioterapias que dejaron de aplicarse en el sector salud, pero esos enfermos y sus padres y familiares fueron tildados de terroristas.
Sin embargo, el tráfico de medicinas sigue siendo un negocio redondo para los que venden al gobierno. Hay denuncias verbales, como en todo y durante las mañanas, pero nada se concreta en una investigación penal y en fincar responsabilidades, pues en no pocos caso se trata de amigos de los hijos del santo patrono tabasqueño, e incluso de sus familiares.
¿Qué ocurrirá con esos menores de edad que han crecido subalimentados, que desarrollan anemia, incluso de la perniciosa? Quizá en algún momento deseen contraer matrimonio, o sólo emparejarse y engendrar hijos, ya podemos imaginar el producto, pero serán los hijos ideales para convertirlos en súbditos del humanismo mexicano, humillados y la cerviz agachada ante los tata mandones de esta 4T, sin parangones en la historia patria, ni siquiera con el peor PRI, ya no digamos PRIAN o PRD o VERDE.
Para realmente reconstruir el sector salud, se requiere de la voluntad de reorientar el gasto clientelar, reducirlo, y empezar a producir riqueza desde el minuto cero de la toma de posesión de Claudia Sheinbaum Pardo, porque de no hacerlo así, más pronto que tarde afianzaremos nuestros pasos y futuro crecimiento, en la misma ruta que siguen las repúblicas bolivarianas, notoriamente Venezuela y Bolivia, seguidas por Nicaragua y Cuba. El que no quiera verlo que se tape los ojos y extienda la mano para recibir su plástico del bienestar.
Ahora nos salen conque resucitan el proyecto del médico en su casa, ¿con matasanos cubanos y venezolanos? A fin de cuentas, a caballo dado no se le ve colmillo.
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