Quiero felicitar a las diputadas y diputados federales que votaron en contra de la reforma, con esa decisión de parar esa reforma regresiva electoral, gana México, gana la democracia, porque intentar desaparecer los órganos electorales, los tribunales y dejar en manos de la de la burocracia partidaria la designación de diputados y senadores, a ser solo de representación proporcional que obedecerían a su líder político y no a la ciudadanía, a los electores, peros sobre todo, el parar la intentona de vulnerar los organismos electorales para someterlos a la voluntad del gobierno, como sucedió hace más de 3 décadas.
Valió la pena el sacrificio de cientos de compañeras y compañeros que ofrendaron su vida para que en este país exista la democracia, no permitamos la regresión.
No al intento de regresar al pasado y si al fortalecimiento de la democracia.