Las mujeres ya pueden solicitar su implante subdérmico anticonceptivo en el centro de salud más cercano, pues las autoridades de salud ofrecen este servicio de forma gratuita, como uno de los métodos de planificación familiar de larga duración.
Este implante es subdérmico porque se aplica por debajo de la piel, con anestesia local, en la parte interna del brazo y tiene una duración de tres a cinco años. El efecto es reversible, pues cuando se retira el dispositivo, vuelve la fertilidad rápidamente.
Se trata de una varilla flexible que inhibe la ovulación porque contiene hormonas similares a las que produce el cuerpo de la mujer y es colocado por personal médico capacitado en un consultorio por lo que no requiere de hospitalización, sólo de un vendaje.
Una vez colocado, la paciente debe volver a revisión a los siete días y posteriormente cada año, para revisar que no presente reacciones adversas como sangrado abundante que dura muchos días y pueda ser tratada con medicamentos.
El implante puede producir un leve aumento de peso y acné; al concluir el periodo de protección se debe regresar a la unidad de salud para su retiro y nunca intentar hacerlo por cuenta propia en casa.