Especial/Portal Hidalgo
No solo la exclusión de auténticos morenistas, sino la incorporación igual de priistas que perredistas al gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla, han desatado duras críticas de la militancia y de la sociedad.
Así lo deslizó Ana Lilia Guillén dirigente estatal de Morena y señaló que la incorporación del perredista Antonio Soto Sánchez, como Coordinador de jefaturas de sector de la administración estatal, reavivaron la indignación de miles de morenistas fundadores que observan con impotencia como se desdibuja la 4T en Michoacán.
Para muestra basta un botón: El actual secretario de Gobierno y Antonio Soto Sánchez, provienen de las corrientes ADN y Nueva Izquierda, comandadas respectivamente por Héctor Bautista y Los Chuchos. Tribus políticas que por cierto, han sido las más destructivas y letales, a grado tal, que llevaron al PRD casi a su extinción, acotó.
En conferencia de prensa precisó que La lista de impresentables del gobierno estatal es larga, igual que lal anomalías que se han registrado desde el inicio de la gestión de Ramírez Bedolla. En lugar de cuidar los detalles, como aquellos en los que neo-morenistas les piden “moches” de hasta el 50% de sus salarios a quienes invitaron a laborar, a otros se les permite que se vayan impunes con lo que han logrado recaudar en este gobierno; en tanto que a unos más, aparentemente, se les permite aceptar dádivas.
Incluso, apuró, un velo de impunidad se ciñe sobre este gobierno: ahí están los casos del chofer de un funcionario policiaco, por cierto, Compadre de nuestro Gobernador, que fue sorprendido con un maletín con más de un millón de pesos en efectivo ¿y qué pasó con ello? Nada. Se le exonero de manera Pública, por un funcionario de alto nivel; también están los acusados de violentar a niños y mujeres y cuyos expedientes fueron enviados a dormir el sueño de los justos.
Hoy, al igual que el grueso de la sociedad, los morenistas vemos las similitudes entre los gobiernos de Silvano Aureoles y de Alfredo Ramírez Bedolla, que son cada vez más grandes.
Para Ana Lilia Guillén esto es lógico, toda vez que el gabinete actual lo integran los mismos que en el último sexenio, “gobernaron” el Estado, aunque con una enorme diferencia, al primero se le tildaba de frívolo porque se atrevía a invitar artistas, pasear lindas jovencitas en caballos finos, llevarle serenata a su progenitora con Los Tigres del Norte o llevar a su grupo favorito a fiestas privadas; mientras que el segundo que presume de austeridad, no solo repite las bacanales, sino que festeja con El Sol, quien por cierto, va a regresar a finales de este año.
Por otro lado expuso que son muchas las pruebas fehacientes de morenistas a los que no sólo se les excluye, sino se les califica de no estar preparados para desarrollar cargos en el gobierno; sin embargo, aquí, entre la militancia y la sociedad michoacana sin partido, hay gente con formación académica y de probada honestidad como para formar parte del gabinete; lamentablemente esos espacios se han entregado a personajes a quienes al día de hoy, se les califica por su ineptitud, ausencia de ética y probidad en el ejercicio de cargos gubernamentales, que han desempeñado en otras administraciones, igual priistas que perredistas, sobresaliendo aquellos, que tienen lazos de amistad o Compadrazgo, con el actual Mandatario. Obvio, se gobierna sin hacer la DIFERENCIA, violentando asimismo nuestro Estatuto, que en su Artículo 3°, inciso F, señala que esas prácticas, como el AMIGUISMO, NEPOTISMO, COMPADRAZGO E INFLUYENTISMO, deben ser desterradas en los gobiernos de la 4T.
Ahí están los casos, apuró, de quienes tiene en sus manos las políticas de Desarrollo Rural, de Bienestar y Educación en la entidad; o hasta del clan Orihuela, de triste memoria, que logro incrustarse en la línea gubernamental para gozando de los beneficios del erario público.
Y como broma, a los morenistas se les sugiere buscar puestos en el mercado, mientras que a los efebos y queridas se les aseguran los mejores cargos en el gabinete. precisó.
Ante ello hizo un exhorto al gobernador Alfredo Ramírez Bedolla a corregir el rumbo, a velar por los mejores intereses: los de la colectividad…
A trabajar con auténtica honestidad…
A no mentir y no traicionar a quienes lo llevaron al Solio de Ocampo.
Le pedimos afrontar con astucia y energía las problemáticas sociales.
Junto a la sociedad, le pedimos también resolver el problema de la inseguridad, atender la educación, proyectar y ejecutar obras y no solo inaugurar otras que fueron proyectadas y ejecutadas con recursos de aquel gobierno que hoy crítica y acusa de corrupto, pero contra el cual, legalmente, no han hecho nada, como no sea invitarlos a trabajar en su gabinete, concluyó.