El Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT) en el Congreso de Michoacán, reconoció que el balance es positivo y conveniente en la administración de Alfredo Ramírez Bedolla, al frente de Ejecutivo Estatal; sin embargo, también se identifican pendientes con la población.
A nombre de la bancada petista y en voz del diputado Hugo Ernesto Rangel Vargas, se dijo que la entidad está en un proceso de cambio, existen logros, pero hay que profundizar en el bienestar de la población en rubros específicos.
“El gobierno de la entidad cambió. A la mitad del camino los balances son válidos y convenientes; su gobierno (el de Alfredo Ramírez) ha permitido recuperar la normalidad de muchas áreas de la vida pública en favor de la estabilidad financiera, la salud, la educación y el bienestar de millones de michoacanas y michoacanos. Como partido que formó parte de la alianza que le postuló, nos sentimos congraciados, pero no satisfechos, hay deudas pendientes con quienes confiaron en nosotros, y sobre todo, quedan deudas pendientes con el pasado y con quienes mancillaron la palabra y la confianza de nuestro pueblo”, dijo Rangel Vargas.
El Legislador del Partido del Trabajo, aseguró que la izquierda debe estar firme en las causas de la lucha que los ha llevado a ser representantes populares, dejar de lado las prácticas del pasado y sentir el lado izquierdo del corazón.
“Somos herederos de las luchas más profundas del pueblo michoacano, hay que robustecer nuestros compromisos con los más humildes, con nuestros aliados y con nuestros hermanos. Si después de esta revisión dudamos, debemos corrernos en nuestras definiciones a la izquierda, y si prevalecen nuestras dudas, hagámonos más aún a la izquierda; ahí en donde late nuestro corazón”, puntualizó el legislador.
Por último, Rangel Vargas aseguró que desde el Congreso del Estado el objetivo es seguir haciendo historia, serán 3 años de profunda transformación y que la mejor forma de hacerlo es en unidad y con trabajo conjunto por Michoacán.
“No olvidemos que venimos de la historia y hacia la historia vamos. Ese juicio será ineludible y como parte de este momento irrepetible del destino de Michoacán, tenemos aún herramientas para transformar el porvenir. Tres años han sido poco, tres años más pueden ser suficientes para hacer que nuestra palabra valga. Hagámoslo juntos”, concluyó Hugo Rangel.