Sergio Cortés Eslava
Otra vez el discurso de odio y falso de AMLO contra la SCJN, donde habla de los privilegios de los ministros, ciertos todos ellos, ofensivos todos ellos en un país brutalmente empobrecido ciertamente por AMLO. Pero lo que no menciona el remedo de dictadorzuelo, son los privilegios que él mismo goza junto con su familia y allegados, que también son ofensivos hasta la ignominia.
Primero los pobres, dice el canallezco y los pobres le aplauden cual personajes simiescos cuando les arroja su “dinerito” que es de los que pagamos impuestos, no de AMLO, que quede claro.
Primero los pobres, dice el sinvergüenza mientras sus hijos gozan de cabal salud y de la vida de millonarios que tanto falsamente desprecia.
Primero los pobres, dice el mesías tropical mientras azuza a su ejército lumpen proletariado para reforzar su acabar con las instituciones.
Primero los pobres, arenga el reyezuelo mientras come como rey de una república bananera, junto con sus bien comidos y obesos hijos, en un palacio de millones y millones de pesos que no es suyo y que no le cuesta ni un peso, mientras muchos, miles, no tienen para pagar una renta.
Primero los pobres, dice el tipejo, porque los pobres mientras más pobres, pobres, lo sostendrán en el poder.