Orlando Daniel Hernández
El año pasado fue un muy complicado para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, pues del total del presupuesto con el que contaba la dependencia estatal, una gran parte del recurso se utilizó para sanear las finanzas.
Lo anterior derivado de la gran carga de adeudos arrastrados de años anteriores, por concepto de proveedores, maquinaria y a programas para el campo, expuso la subsecretaria de Desarrollo y Organización, Marx Aguirre Ochoa.
A la fecha se han pagado cerca de 400 millones de pesos, por concepto de apoyos al campo, maquinaria y a proveedores, y de acuerdo con la funcionaria estatal aún están pendientes alrededor del 500 millones de pesos por infraestructura entre otros conceptos, que serán poco a poco subsanados, gracias al aumento de 750 millones en el presupuesto de la dependencia.
Para el 2023 el reto de la dependencia será brindar a las familias las condiciones para la producción, creación de cooperativas y fomentar el desarrollo regional rural sustentable, a través de los programas de agrosano, produce lo que te comes, maquinaria, mejoramiento genético del ganado, economía solidaria y financiamiento.