El cáncer de mama continúa siendo una de las principales causas de muerte a nivel global. En 2022, en México ocupó el primer lugar en incidencia con 31,043 nuevos casos diagnosticados y el segundo en mortalidad, con 8,195 defunciones.
Estas cifras subrayan la necesidad de seguir avanzando en todos los aspectos del abordaje de la enfermedad, desde la detección temprana hasta las opciones terapéuticas adecuadas y en el momento oportuno, con el fin de mejorar los resultados y la calidad de vida de los pacientes.
Uno de los factores clave para lograr estos avances es entender que el cáncer de mama no es una enfermedad única, sino un conjunto de subtipos con características biológicas y clínicas distintas en cada paciente, juegan un papel crucial en el desarrollo de tratamientos personalizados.
De acuerdo a su diagnóstico, se dividen en: Luminal, HER2-positivo y Triple Negativo. Gracias a técnicas avanzadas, incluidas en el portafolio de la división de Diagnósticas de Roche, como la inmunohistoquímica aplicada*, los médicos pueden obtener información detallada sobre el perfil tumoral de cada paciente a partir de una muestra de biopsia del tejido mamario y el análisis de biomarcadores.
Esta precisión en la clasificación permite que los especialistas tomen decisiones más informadas y personalizadas para cada caso.
Nuestras dos divisiones “Diagnóstica y Farma” trabajan en conjunto para desarrollar tanto pruebas de diagnóstico como terapias innovadoras con el objetivo de transformar el abordaje del cáncer de mama. Nuestro portafolio HER2+, que incluye terapias innovadoras, Trastuzumab IV y subcutáneo- Pertuzumab IV – Trastuzumab emtansina – Pertuzumab – Trastuzumab Subcutáneo, es un claro ejemplo de cómo estamos avanzando en tratamientos más precisos y personalizados.
Contamos con opciones terapéuticas diseñadas para diversos biomarcadores, lo que nos permite acercar la medicina de precisión a tipos específicos de cáncer. Esto se traduce en un enfoque individualizado para cada paciente, basado en información detallada de su enfermedad, lo que permite a los especialistas tomar decisiones más informadas y personalizadas para el tratamiento.
En 2023, Roche introdujo en México una terapia subcutánea que combina dos medicamentos (trastuzumab y pertuzumab) en un solo vial y que se administra en tan sólo 8 minutos, indicado para el tratamiento del cáncer de mama HER2-positivo en etapas tempranas y metastásicas.
Este avance no solo reduce considerablemente el tiempo de administración en comparación con las terapias intravenosas tradicionales, sino que también optimiza los recursos del sistema de salud y mejora la experiencia de los pacientes. Esta terapia representa un hito en la gestión integral de esta enfermedad, brindando nuevas oportunidades y esperanzas a las pacientes que la enfrentan.
En un estudio con 160 pacientes, el 85% expresó preferencia por esta vía de administración debido a la reducción del tiempo que pasaban en la clínica y la mayor comodidad durante el tratamiento.
Además de sus avances tecnológicos y terapéuticos, Roche impulsa la educación médica mediante el programa de actualización en cáncer de mama “Sospecha, detecta y deriva”. Esta iniciativa apoya a los médicos generales de primer contacto, brindándoles herramientas clave para identificar casos sospechosos y referir a los pacientes para un diagnóstico oportuno.
Mirando hacia el futuro
La evolución en el desarrollo de soluciones terapéuticas de Roche sigue avanzando, expandiendo las opciones disponibles para tratar otros subtipos de cáncer de mama con receptores hormonales positivos (mutación PI3KCA). Esta nueva terapia ya ha sido aprobada por la FDA.
Nuestra visión es liderar la cura del cáncer. Esa es nuestra audaz ambición. Nos enorgullecemos de ser una compañía que puede ofrecer soluciones integrales que abarcan todo el recorrido de una paciente que vive con cáncer de mama (concientización, diagnóstico, tratamiento, seguimiento).