Tiempos difíciles
Paco Ramírez
@ramirezpaco
Intenso el tema económico en estos días.
De entrada, es un hecho que no alcanzaremos la meta de crecimiento planteada por el gobierno federal de 4 por ciento, si bien nos va, asegura el INEGI, cerraremos la administración de López Obrador en 1.1%, el más bajo desde Miguel de la Madrid.
Se dio a conocer también el informe detallado 2018-2024 sobre el estado actual de las finanzas públicas.
Se habló de equilibrio, de que el modelo es mexicanísimo, que no sigue ninguna regla internacional, ni ninguna receta (no se si eso sea garantía de buenos números).
Se destacó que el salario mínimo aumento 114% en términos reales, que la pensión anual de adultos mayores paso de $9,400 en 2018 a $36 mil pesos en 2024 y que se invirtieron más de 5 billones de pesos en las Megaobras.
Sin duda un informe de cuentas alegres, incluso al hablar de deuda pública.
Rogelio Ramírez de la O el secretario de Hacienda dijo que se está encontrando (ojo no lo han encontrado), el obligado balance entre gastos e ingresos y se tuvo que admitir la existencia de la deuda pública, algo que López Obrador dijo que ya no existía.
Creció 4.3% respecto a 2018 quedando en 48.6%, el monto neto 16.14 billones de pesos.
Uno se pregunta. ¿En dónde está el boquete, en que nos hemos gastado el dinero? Y saltan a la vista, las Megaobras, varias aún inconclusas (Tren Maya, Dos Bocas, AIFA), apoyo a Pemex un barril sin fondo, CFE y los programas sociales, que lenta, pero con certeza van minando las finanzas.
Al final todo esto impactará en la calificación crediticia del país y por ende implicará pagar una deuda cada vez más cara, poniendo en riesgo el primer año de la nueva administración de Claudia Sheinbaum y enfrentándola con la tan mencionada y eludida reforma fiscal.
Tiempos difíciles.
¿Quién pone orden en la casa?