Durante estas vacaciones de verano se recomienda a padres de familia brindar a sus hijos una alimentación saludable y balanceada para prevenir sobre peso u obesidad.
Recomienda comer una variedad de alimentos para que reciba todos los nutrientes como proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales; así como beber un litro de agua diario, es importante evitar el consumo de bebidas azucaradas, dulces y comida chatarra.
Es importante apoyar los hábitos alimentarios saludables de su hijo, para ello, es necesario comer juntos en familia, elegir alimentos sanos (frutas, verduras, carne, pollo, pescado por mencionar algunos), comer aproximadamente a la misma hora todos los días y siempre hacerlo en la mesa aún con los refrigerios.
Realizar las tres comidas con sus colaciones entre desayuno, comida y cena, para evitar que el niño o la niña sienta mucha hambre y lo más importante realizar actividad física durante las vacaciones (limitar tiempo frente a televisor, celular o video juegos).
Un niño o niña con malos hábitos alimenticios tienden a tener el sistema inmunitario más débil, lo que aumenta el riesgo de enfermedades del corazón, presión arterial alta, diabetes y obesidad.