Orlando Daniel Hernández
El captador de agua más grande de Latinoamérica, que está considerado como una maravilla de ingeniera y que se ubica en el cerro del Kukundicata en Cherán, Michoacán permite almacenar más de 20 millones de litros de agua sin necesidad de desforestaciones ni excavaciones.
El proyecto, inició aprovechando un cráter en el cerro que fue revestido con una membrana plástica para evitar la filtración del agua al suelo.
El impacto de este captador de agua es considerado como un ejemplo, luego de que más de 16 mil habitantes se benefician de una reserva del vital líquido que dura hasta cuatro meses abasteciendo edificios públicos y hogares.
Además, una planta purificadora comunal permite la venta de garrafones a un precio menor en el mercado.
Este captador conserva un triunfo en la conservación del agua y el medio ambiente y es el testimonio de una comunidad unida que muestra al mundo que si es posible enfrentar desafíos ambientales y sociales con proyectos innovadores para la gente.