Yo Campesino
¿Gran Legado?
Miguel A. Rocha Valencia
Termina la era del ganso en lo formal y al hacer un balance de sus “grandes logros” lo único que se subraya fue el reparto de cerca de 2.2 billones de pesos en programas clientelares que no resolvieron pobreza, pero si generaron más paternalismo, retroceso educativo, improductividad y aumento en importaciones agropecuarias.
Por lo demás, deja grandes deudas en salud con más de 360 mil mexicanos que no debieron morir, desabasto de medicinas, disminución de personal de salud (con sus cinco mil integrantes fallecidos de Covid-19, la saturación del IMSS que junco con el ISSSTE enfrentan graves problemas en materia de modernización y equipamiento, así como en las finanzas donde las pensiones, son la mayor carga.
Mintió el tlatoani con la corrupción en la compra de medicamentos, la fabricación de respiradores mecánicos, con la creación de una vacuna Patria “marca propia” que además de pirateada, nunca estuvo disponible en la pandemia y se hundió en un mar de tanta corrupción, que mejor reservaron por cinco años los miles de millones de pesos que se escamotearon en fármacos para todo tipo de enfermedades incluyendo inmunológicos.
También y más allá de los 190 mil asesinatos a la fecha que superarán los 200 mil al 30 de septiembre, deja un crimen organizado tan empoderado en amplias zonas del país que es capaz de asesinar a candidatos a cargos públicos antes escoltas militares y de la guardia nacional, en un abierto desafío a la autoridad para decir “aquí mando yo y pongo a mis gobernantes” a grado tal que gubernaturas y alcaldías les pertenecen y hay quien afirma que su influencia llega a la Presidencia de la República.
Dejan bien claro los criminales que los abrazos presidenciales convirtieron a los gobernantes en el brazo político de la delincuencia organizada empoderada de varios estados, aunque el ganso diga la contrario y asegura que estamos en paz.
El miedo es tanto que hubo estados donde nadie quiso ser candidato y muchos de quienes se atrevieron, fueron asesinados o al menos amenazados o secuestrados aun con la custodia militar.
Pero además de ese legado de miedo o mejor dicho de terror el macuspanense será recordado por mentir, por ser un excelente y desvergonzado escenógrafo que nos inventó un trenecito que recorre un aeropuerto sin terminar, que no resuelve las necesidades del aerotransporte en el Valle de México, debe ser subsidiado por su inviabilidad financiera con todo y los decretazos para acarrearle clientela.
Un AIFA que sustituyó una obra de primer mundo bajo el falso argumento de corrupción del cual estuvo y está impregnado el aeropuertito de Santa Lucía que ya no tiene para dónde crecer y al cual habrá que seguir subsidiando con un mínimo de dos mil millones de pesos anuales.
Nos mintieron cuando se dijo que la cancelación del AIFA costó menos de 300 mil millones de pesos tirados a la basura al igual que más de 35 mil millones de dólares que ya estaban listos para invertirse en obras y acciones “periféricos” tanto en hotelería como en trasportación y negocios de todo tipo para generar 120 mil empleos directos con salarios de “primer mundo”.
Mintió cuando dijo que ya se había pagado la deuda y aun se deben cerca de tres mil millones de dólares de la fibra verde (capital privado) que se adquirió para construir el NAIM y cuyo costo sale del TUA del AICM sacrificando los fondos para su mantenimiento.
Nos engañaron o al menos trataron con la “inauguración” de una refinería que de los 13 pasos de refinación apenas cubre uno. Fue falso que costaría ocho mil millones de dólares ya que el propio secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, reconoce que ahí se están canalizando cerca de 22 mil millones de dólares, es decir, casi el triple como sucede con un trenecito que también se puso en servicio sin terminar y ya supera los 500 mil millones de pesos incluyendo los 120 mil millones de pesos de este año. Claro también hay que subsidiarlo.
Falseó descaradamente el mesías tropical en el combate al crimen organizado y la corrupción. Luego de seis años, nadie está en la cárcel de aquéllos que dijo serían encerrados por rateros; la única fue Rosario Robles y está libre por falta de pruebas en un asunto por cinco mil millones y a cambio, el tema de Segalmex con tres veces más de hurto es, al igual que los hijos el caudillo, el mayor signo de impunidad sexenal.
Nos mintió cuando a pesar de las evidencias afirmó que se trataría de los comicios más pacíficos de la historia y resultaron los más sangrientos con un crimen organizado desafiante y empoderado en todas las esferas del quehacer nacional.
Hay más, mucho más en ese gran legado del mesías tropical y por el cual pasará y será juzgado por la historia y esperemos que también por la justicia, aunque se tarde un poquito.
