“FAEISPUM manoseado”
Christián Gutiérrez*
En Michoacán existe el programa llamado “Fondo de aportaciones estatales para la infraestructura de los servicios públicos municipales” (FAEISPUM) con el cual el gobernador saluda con sombrero ajeno, porque son recursos federales que le corresponden a los ayuntamientos de la entidad, pero él los entrega a discreción, bajo reglas impuestas y criterios orientados para sus fines “de obra pública”.
El gran problema de este programa es que, como nunca antes se había visto en la historia reciente de Michoacán, el gobernador concentra recursos que legalmente no le corresponden y con esto cancela derechos de la población. Los cancela porque los municipios tienen la atribución constitucional y la obligación legal de hacer obras, pero el gobernador ahora se empeña en apropiarse de recursos ajenos para desviarlos a fines diversos, y si recordamos que estamos en un proceso electoral, podemos inferir para qué los usará.
Muchos municipios michoacanos se encuentran en esta situación injusta e ilegal, por ejemplo, en 2013 el alcalde de TzinTzunTzan, José Guadalupe Ramírez, demandó que el poder ejecutivo de Michoacán no les quería entregar los recursos del FAEISPUM completos y que la secretaría de finanzas estatal les exigió hacer una obra con características intermunicipales (conjuntamente con el municipio de Quiroga) si es que querían ver liberados sus recursos.
Morelia, es otro municipio que ha batallado con este programa. El gobierno estatal dejó de entregarle sus recursos del año 2023 y los de este año 2024, con seguridad no serán entregados. ¿Por qué? Simplemente porque el gobierno del estado no quiere entregarlos (con argumentos legaloides que van más allá de la autonomía municipal constitucional) y por otra sencilla razón que está en letras chiquitas en los “convenios” de este programa: los recursos que finalmente no son entregados, se los queda el Ejecutivo del estado y los direcciona hacia donde guste. ¿Esto es un desvío de recursos? Sí, con todas sus letras.
Las autoridades municipales y las y los ciudadanos de los municipios deben saber esto para medir en su justa dimensión el tipo de políticos que gobiernan y ya no permitir injusticias.
*El autor es consultor y capacitador, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho.
