Sergio Cortés Eslava
Este fin de semana aquí en Michoacán, la violencia generada por el crimen organizado, dejó como saldo 13 personas asesinadas, producto de enfrentamientos entre grupos rivales del narco y con fuerzas armadas federales y estatales.
En Apatzingán, fueron hallados los cuerpos de tres hombres, dos de ellos decapitados. Uno tenía entre 15 y 20 años de edad.
Otras ejecuciones se registraron en los municipios de Múgica, en la Tierra Caliente, otra en Morelia, la capital del estado; en Uruapan también ocurrieron tres ejecuciones en este fin de semana.
En Álvaro Obregón, agentes de la Fiscalía estatal se enfrentaron a unos secuestradores, abatieron a un delincuente y lograron liberar a tres víctimas.
En la comunidad de La Ruana, en Buenavista, dos presuntos sicarios fueron encontrados muertos con impactos de bala de grueso calibre.
Los fallecidos vestían ropa camuflada, portaban equipo táctico y habrían participado en enfrentamientos protagonizados por “Los Viagras” y “El Cártel del Abuelo Farías”, que se disputan el control de dicha población.
En la sierra de Tumbiscatío, dos sicarios murieron al enfrentarse a balazos contra los elementos del Ejército; tras el zafarrancho, los militares aseguraron cinco armas de fuego de alto poder, diversos cargadores y cartuchos de armas largas.
Así fue este fin de semana aquí en Michoacán.
