Sin la sociedad civil, Xóchitl está perdida

PODER PÚBLICO

José Cruz Delgado

Xóchitl Gálvez inició su precampaña rumbo a la presidencia por el Frente Amplio por México en el municipio de Coyuca de Benítez, Guerrero, a donde Andrés Manuel López Obrador se atreve a visitar por temor a que le mientan la madre, y “se manche su investidura presidencial”, mucho menos la machucada corcholata Claudia Sheinbaum.

Efectivamente, es uno de los municipios que forman parte de la región donde el huracán Otis no tuvo compasión. La representante del FAM tuvo las agallas para ir a ese lugar, pese también al clima de inseguridad, y encabezó la “Marcha de la Esperanza” junto a miles de personas, que no fueron por torta y el chesco, sino por convicción, convencidas de que Xóchitl representa el nuevo cambio que millones de mexicanas y mexicanos quieren tras el fallido gobierno de la maldita 4T, que representa la esperanza para echar de Palacio Nacional al capo de la mafia de la corrupción y a sus pandilleros que abusando del poder y la impunidad han robado a más no poder y se han hecho multimillonarios.

La chachalaca tabasqueña representa lo más podrido y lo más corrupto y que engañó a más de 30 millones de mexicanos con la promesa de que se iba a acabar la corrupción, pero resultó peor que sus antecesores, y no sólo eso, se convirtió también, presuntamente en el jefe de jefes de la delincuencia organizada con su política de abrazos y no balazos.

López Obrador y su pandilla de rufianes que se apoderaron de Palacio con falsas promesas, promesas que nunca cumplieron, y que hoy representa lo más puerco de esta administración. (con perdón de estos pobres animalitos que no tienen culpa de nada).

Pero volviendo al tema Xóchitl, caminó a la cabeza de miles de mujeres y hombres con velas en mano, en una “marcha por la esperanza”.

Sí hay otra esperanza, dijo la abanderada de la oposición, y la población merece un gobierno que sí la escuche y acompañe en momentos de necesidad, que esté de tu lado cuando más lo necesitas, escribió.

Pero vale la pena aclarar que los morenistas intentaron empañar el arranque de precampaña y en cartulinas agradecieron el apoyo por las despensas pero que no la querían y que no viera tragedia con fines políticos. La intención fue muy clara, quisieron descarrilarla, boicotearla, pero no lo lograron, pero está acostumbrada a lidiar con ese tipo de gente mal intencionada y no teme a las críticas ni a las adversidades, ni tampoco la huye a los espacios vacíos, como la protegida de “ya sabes quién”.

Por cierto, tras las renuncias de los priistas Adrián Rubalcava y Alejandro Murat Hinojosa, celebró que los priistas corruptos hayan dejado el partido, porque “no quiero ese PRI”.

Xóchitl debe buscar el acercamiento con la sociedad civil, no solamente con la militancia de los partidos, no debe hacer caso a las sugerencias de sus colaboradores que en muchas ocasiones más que ayudar estorban y ponen filtros para acercarse a ella. Señora, usted es arropada por la sociedad civil y no permitan que nadie la aleje de ella porque si no, la oficialista va a pasar por encima de usted.

MARCELO Y MONREAL SON PURO CIRCO
¿Usted le creyó a Marcelo Ebrad y a Ricardo Monreal todo el circo que montaron? Yo no, porque eso fue, un acto circense, muchos sabíamos que no iban a pasar por encima del dedo presidencial, pero bueno, los empinaron como siempre y finalmente vendieron su dignidad por un cargo público o de elección popular, claro, plurinominales, digo, para ir a la segura.

Nomás le dijo el amo al carnal Marcelo cállese, y bastó para inclinar la cabeza como perro regañado y terminara con su show. A Monreal le pasó lo mismo, pero a él lo aplacó su Eminencia cuando vio que empezaba a salirse del huacal y listo, al final lo mandaron de sirviente con Claudia Sheinbaum.

Al final ambos van por cargos, carentes de dignidad y credibilidad.

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