Los Mártires de Uruapan son una guía moral de México, pues representan tres valores fundamentales: convicción, amor a la patria y valentía en la lucha contra las potencias extranjeras e imperialistas, destacó Silvia Figueroa Zamudio, oradora oficial por el 158 aniversario luctuoso de José María Arteaga, Carlos Salazar, Trinidad Villagómez, Jesús Díaz y Juan González, quienes dieron su vida por defender a México.
En el acto solemne y republicano encabezado por el presidente municipal, Ignacio Campos Equihua, y el gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, Silvia Figueroa Zamudio hizo una semblanza de un momento decisivo para la patria, pues Benito Juárez fue el encargado de defender a la nación de los intentos de ocupación extranjera, en una lucha donde los Mártires de Uruapan representan los principios fundamentales para la construcción de instituciones y de la vida pública de México.
Previo al depósito de una ofrenda floral y guardia de honor a cargo de Ignacio Campos y Alfredo Ramírez Bedolla, la oradora reconoció que los Mártires de Uruapan son la guía para enfrentar los retos de la nación mexicana que requiere de coincidencias y unión para consolidar la transformación, por ello son dignos de reconocimiento y homenaje.
Martina Navarro, Jesús Flores y Javier Marín, recipiendarios de la presea mártires de Uruapan
Martina Navarro, en la categoría Artes Aplicadas; Jesús Flores, en la categoría Altruista; y Javier Marín, en la categoría Artística, fueron galardonados con la Presea Mártires de Uruapan que celebra a instituciones, personas y organizaciones por su contribución al desarrollo del pueblo uruapense.
En el décimo aniversario del galardón, y en el marco del 490 aniversario de la fundación hispánica de Uruapan, Martina Navarro, oriunda de Capacuaro, fue reconocida por su labor en el maque incrustado, arte que le ha otorgado múltiples premios y por el que es reconocida, además de su tenacidad para superar la discriminación y la injusticia.
Jesús Flores Paz fue premiado por la claridad de su visión para transformar un negocio familiar en una empresa nacional, así como por su contribución altruista en temas de salud y educación, por lo que fue condecorado con el doctorado Honoris Causa de la UNAM.
Mientras que Javier Marín recibió la presea por su destacada participación para apoyar artistas jóvenes para que no deserten de la labor creadora, con 40 años de trayectoria ha participado en decenas de muestras en todo el mundo, integrando colecciones en Bellas Artes, Museo Colonia, Museo del Palacio Real de Milán, Museo Real de Bélgica, Museo de la Cultura de Milán, Museo de Arte de San Diego y el Louvre de París.
