En bloque, las unidades de género de las escuelas, institutos y facultades de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), acordaron hacer frente al acoso y al hostigamiento por lo que trabajarán de manera conjunta con las autoridades para tomar las decisiones necesarias que impidan que la impunidad gane y se sigan lacerando derechos.
Decenas de intervenciones enriquecieron la mesa de trabajo en donde se plantearon las principales necesidades y se mostró la realidad que se vive en las instituciones. La rectora Yarabí Ávila advirtió que, de manera individual no se logrará nada, por lo que reconoció el esfuerzo que hacen en colectivo.
El objetivo de la reunión, además de buscar a quien coordinará estos trabajos, cuyo nombramiento surgirá de propuestas de las titulares de las Unidades de Género, es para saber en dónde está parada la Universidad Michoacana, identificar cuáles son los obstáculos a los que se ha enfrenado, cuáles son las fortalezas, cuáles son las áreas de oportunidad para que de manera conjunta se establezca el plan de trabajo.
Las propuestas fueron contundentes: cultura de la paz, alto al acoso y al hostigamiento sexual.
Durante las exposiciones, las participantes compartieron que es necesario que las instancias encargadas de atender esta problemática además de ser preventiva, deben apostarle a la difusión. Consideraron que se tiene que fortalecer la cultura de la denuncia e implementar una política con perspectiva de género en toda la Universidad Michoacana.
Definen como necesario que también se escuche al estudiantado, donde seguramente surgirán otras problemáticas y que también se revisen y actualicen los protocolos, y que en esta tarea todas las personas involucradas en la agenda de género participen, pero también se le dé voz a las y los estudiantes, profesores/as y trabajadores. “Si no se nombra, ni se visibiliza, es como si no existiera el problema”, comparten asistentes.
Agregaron que también es importante que se elabore un diagnóstico integral, que se desarrollen protocolos de actuación para los casos de violencia, entre otras tareas.
La rectora insistió en que es vital que se le den dientes a la universidad y a los órganos y coincidió en que es necesario que haya castigos ejemplares contra las personas infractoras.
Por su parte, el secretario general, Zoe Infante Jiménez, compartió en que se requiere fortalecer la cultura de la paz e inclusión. Combatir la discriminación y darle seguimiento a la agenda de género que es una prioridad para este rectorado. Destacó que en el gobierno federal la rectora Yarabí Ávila, ha manifestado insistentemente en que será una prioridad.